Si
queréis sorprender a las visitas de una forma divertida sin liaros
demasiado, aquí tenéis una presentación de ensalada muy fácil y
efectiva.
En este caso, hice una ensalada de espinacas, queso y frutos secos, muy sencillita, pero se puede hacer con cualquier otro tipo de ensalada o variante.
El secreto de la presentación son tortas de arroz, que normalmente comemos en un restaurante chino.
Antes
de empezar a montar las tortas, hay que hacer la ensalada por separado,
con los ingredientes que se quieran meter cortados bastante pequeños,
para poder hacer el rollito cómodamente y sin que se rompa la torta. No
olvidar aliñar la ensalada, pues después no se podrá... En este caso,
hacemos un aliño con vinagre de Módena, miel y mostaza.
Montaje:
Estas
tortas vienen en paquetes de diez, y son similares a las obleas. Para
manejarlas, hay que introducirlas de una en una en un recipiente grande
con agua caliente con cuidado de que no se doblen, pues se pegan con
cierta facilidad. Una vez ablandada, se pone cada torta en una
superficie preferentemente de plástico para que no se pegue y se pone
una cantidad de ensalada en el centro y... a hacer rollitos! (Consejo:
haciéndolos rodar quedará una forma más cilíndrica).
La
presentación, por supuesto, depende de gustos; si los ponemos en platos
individuales se pueden cortar por la mitad, o si los ponemos en una
fuente, todos juntos con frutos secos por encima... Imaginación al
poder!Seguro que se os ocurren mil formas de hacer el rollito, de ensaladas que poner dentro, salsas e ingredientes; yo ya estoy pensando en hacer la variante frita (que de aspecto quedaría como los rollitos de primavera), por ejemplo con salmón y queso en crema, salteado de setas con gambas o berenjenas con queso de cabra... Sólo hay que pasarlos unos segundos por la sartén, con una buena cantidad de aceite caliente, y a disfrutar! :)